sonabia

Fuimos pocos, pero bien avenidos. No hizo falta madrugar. Subimos hasta la mesa desde la que pudimos ver una magnifica panoramica de la Punta de Sonabia y de su playa (dicen que es nudista).
Seguimos andando por el estrecho sendero hasta llegar a la  cuerda. No nos hemos atado pero lo hemos usado de barandilla. La bajada a pelón pintura. Dejate caer.
Llegamos a Liendo. A la izquierda el poldje, a la derecha la mar. Al frente las ruinas de la ermita de San Julian. Ruinas de veras.
Un poco más adelante, junto a las ruinas de la yesera, y la hora de comer. Lo mejor de todo.
Hay que volver al camino. Ligero por la tarde para cruzar junto a la costa y contemplar la erosión.
La llegada a Laredo a través de la puerta que cruza la Muralla. Menos mal que se acaba. Vamos a tomar el café de después de comer y a reposar un rato, mientras algunos vuelven a Sonabia a por los coches. 

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