COLLADO DE HOJA - COLLADO DE LA LLAGUNA. MINAS DE LA AURORA. 20.07.19







Sabíamos que podía ser dura esta ruta y lo fue. Y menos mal que el día estaba nublado. Común sol habría sido mucho más duro.
el sendero junto a la pared de roca
Hemos salido del Collado de Hoja. Es el último punto al que se puede llegar en coche, todo terreno por supuesto, de manera legal en los alrededores del Parque de los Picos de Europa. Cruza Bejes y sigues en dirección al Vao de los Lobos y el Refugio de Andara. Aparece un cartel no muy grande, que te dice que está prohibido el paso, y hay un aparcamiento para unos 20 coches en el que dejas el vehículo y a caminar.
Seguimos por la pista hacia el Vao de Los Lobos, y enseguida, antes de llegar a los hornos del Dobrillo, parece una pista menor a mano izquierda por la que nos metemos. Esa pista da acceso a dos cabañas y se pierde, pero mientras dura... 
La ruta principal lleva a las minas de la Aurora y esta pista por la que vamos son los restos de la pista por donde bajaban el mineral. La hemos seguido en nuestra ruta de hoy peor solo esta parte inferior es ahora usada por los vecinos para acceso a cabañas y, por ello, mejor conservada.
El sendereo a  media ladera
Enseguida llegamos a unas cabañas que se ven cuidadas y con uso ganadero. Una de ellas, la primera, tiene un cobertizo muy pequeño al que se entra en vertical, muy extraño ya que en el fondo hay agua. No hemos investigado pero bien se trata de una cueva de queso o bien un pozo de agua.
Pues aquí desaparece la pista y sigue en forma de sendero. No hay pérdida ya que se aprecia que en su día fue ancho, al menos para paso de caballerías, peor hoy está en desuso. Algún caminante como nosotros y algún que otro pastor que va ver a sus cabras y otros animales en los puertos de arriba.
El camino no engaña, siempre ascendente. Un ziz-zag al principio y luego a media ladera. Llegamos a un bebedero. Se ven prados lo cual es síntoma de que por allí se suben animales para pastar el verano.
Bocamina Mina Aurora
Nuestros sendero sigue ascendiendo y a nuestros pies discurre enterrada, descubierta, hormigonada, según el momento, una tubería que es la que abastece de agua al bebedero. Más adelante nos cruzamos con dos arroyuelos que nacen allí mismo, por lo que no dudamos que la tubería llega hasta allí.
Enseguida aparecen en la ladera enfrente las bocaminas, las distinguimos por los escombros de roca caliza que se aprecia en la ladera. Son perfectamente distinguibles siempre a la puerta de la bocamina. En la época en que se explotaron estas minas, los medios eran escasos y los escombros se tiraban en donde costase menos. La boca mina puede servir para eso y así poco a poco se van formando explanadas de trabajo. Pensemos que los escombros son restos de roca que no contienen mineral, es todo producto natural.
No nos acercamos a las minas. Habría que trepar y ya no estábamos para ello, Preferíamos llegar al collado de la Llaguna, que es nuestro fin inmediato de hoy.
Este último tramo es por un prado y subes por donde puedes. Hay algún sendero pero va a donde quiere. Más bien son sendas de animales en sus recorridos paciendo. Zigzaguea por donde puedas y/o quieras.
Tremendo Mastín
Desde este collado de la Llaguna, hay paso, creo que es algo complicado encontrarlo hacia el pico Samelar y el pico san Carlos. Puedes cruzar la cordillera, pero lo normal es llegar a estos picos desde las vegas de Andara. A ese lugar se llega en todo terreno con cierta facilidad. Pero no es nuestro objetivo de hoy
Nosotros vimos a una manada de cabras y ovejas que estaban allí “veraneando” cuidadas por dos mastines machos y una hembra, al menos. Todos con un collar con clavos de 3 – 4 cm que daban miedo. La verdad es que nos acercamos al ganado. Los perros se nos acercaron se dejaron sobar sin problemas, Yo creo que vinieron al olor del chorizo que había en las mochilas. Cuando íbamos hacia abajo nos acompañaron lo justo para seguir controlando a sus ovejas. Son animales de más de 40 kg cada uno de ellos con un collar anti lobo, por eso las puntas. La verdad es que daban miedo.
Llegando al collado de la Llaguna
Y ahí me caí al suelo y me hice daño en la rodilla. Al levantarme dije ¡AY! y así fue. Una pequeña lesión que me ha dejado el verano prácticamente aparcado.
La bajada, despacio a causa de mi lesión en la rodilla, por el mismo camino. Como siempre con perspectiva diferente y hora del sol diferente ves un espectáculo diferente.
Para nosotros, lo peor del día es que ha estado nublado, en algún momento con nieblas y no hemos podido disfrutar y vislumbrar nada de lo maravilloso que tenemos alrededor. Es lo que pasa en la montaña.
Si indicar que para llegar aquí hay sendero y que es fácil el camino. Duro, pero fácil. Subir al collado de la Llaguna es también fácil ya que solo es subir por los prados hasta el mismo.
Que lo disfrutes.



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